Los fondos de rentas.

Están muy de moda, son la innovación a la que se están apuntando las entidades.

Estoy convencido de que se venden «como un depósito» ya que todo en este país se vende con dos  argumentos:

«es tan seguro como un depósito pero ofrece mas rentabilidad», o alternativamente

«va a pagar muy pocos impuestos»

El primer argumento obvia todos los riesgos asociados a que el producto no es nunca «como un depósito» y que un extra de rentabilidad solo se puede obtener asumiendo mas riesgo o sacrificando liquidez, es de primero de finanzas.

El segundo suena a música celestial pero no nos cuentan otra razón por la que vamos a pagar pocos impuestos: porque la rentabilidad que obtendremos también sea reducida.

Caja de Ingenieros ha sacado su fondo de rentas periódicas: el CI Renta, que no me convence.

La principal razón es de concepto: el reparto de rentas obligatorio de estos fondos tiene trampa:  si el fondo no alcanza una rentabilidad, después de gastos, igual o superior a la renta prometida, la renta se repartirá mediante la devolución de principal invertido con lo que nos estamos comiendo el capital.

Este fondo tiene unos gastos corrientes del 1,59%. Para repartir un 2% sin que tengan que acudir al capital tienen que obtener un 3,59% bruto, es evidente.  ¿Y como piensan obtener tal rentabilidad, que en el entorno actual de tipos bajos es mas bien complicada?

Pues con una estrategia repleta de lugares comunes y conceptos vacíos que tienen la misma trascendencia que el «Ser la empresa líder en el sector en el que operamos» que todas las compañías incluyen en su visión. Anda que no van a estar apretados todos en el liderato del sector.

A lo que iba: el fondo «se apoya en un enfoque multiactivo que pivota sobre renta variable (en torno a un 50% de la cartera), renta fija (un 30%) y REIT (un 20%).»

«La RV variable (buscará) compañías con modelos de negocio sólidos y rentabilidades por dividendo elevadas, que sean sostenibles en el tiempo y con potencial de crecimiento significativo.»

Vamos a darle la vuelta: ¿Alguien invertiría en modelos de negocio endebles, que vayan a desaparecer en un plazo de cinco años por agotamiento y sin potencial de crecimiento?

Bueno, sí. Es lo que hizo media España en la locura especulativa inmobiliaria. Pero no vale, así estamos donde estamos.

«la renta fija ha de ser sostenible a través de emisores solventes, con sólidos balances y capaces de asegurar financieramente el pago a sus acreedores.»

¿Buscaríamos emisores con problemas de solvencia, con balances desequilibrados y potencialmente morosos?

Bueno, hay gente que sí, todos los que compraron pagarés de Nueva Rumasa y que luego se quejaron de que nadie les avisó. Se llamaba Nueva RUMASA. ¿Hace falta mas aviso?

Mañana sigo, que esto ya me está quedando muy largo.

Acerca de Israel Mármol

Economista especializado en relaciones con la banca, finanzas e inversiones personales. Un enfoque algo ecléctico e iconoclasta, a veces irónico, a veces sarcástico, nunca con mala intención.
Esta entrada fue publicada en Formación financiera y etiquetada . Guarda el enlace permanente.

Deja un comentario